Un tribunal federal ha desestimado la demanda presentada por inspectores generales despedidos durante la administración de Donald Trump, según informó Rod D. Martin en su cuenta de X. Los inspectores generales, que supervisaban diversas agencias gubernamentales, alegaron que sus despidos fueron injustificados y políticamente motivados. Sin embargo, el tribunal determinó que el presidente tiene la autoridad para destituir a estos funcionarios, respaldando así las acciones de la administración Trump. Esta decisión subraya la discrecionalidad presidencial en la gestión de altos cargos dentro del gobierno federal.
